REFLEXIÓN DE UN ATEOEl religioso se ha hecho a esta categoría desde que nace en una familia con esta presunción, lo común es que siguen en este camino de la mano de todos sus familiares que al igual que el también comparten la idea. Las congregaciones que imparten la idea de dios desde la infancia los adoctrinan con su teoría, la más común LA IGLESIA CATÓLICA por su rito mas conocido por todos que es el bautismo al recién nacido esto con el fin de ya hacerlo parte de su designio.
El religioso le encuentra un sentido claro a la vida que es ganarse el cielo, un elegante lugar plasmado de los mejores deleites llenos de paz espiritual, acompañados de su pintoresco padre celestial el cual por primera vez conocerán y alabaran por la eternidad. En general la persona religiosa es interesada, puesto que todo lo hace en busca de su cometido que es el cielo. Algunos viven esclavos de su propia ilusión ya que viven atemorizados pensando en que abra después de la muerte y en el que pasara si no voy al cielo.
El ateo promedio se ha liberado de todo tipo de superstición gracias a su razonamiento y lógica, ha renunciado a la absurda creencia de la vida después de la muerte y por ende vive una sola y no imagina más. Nosotros le buscamos el sentido a la vida por difícil que parezca. El universo es implacable, enérgico, feroz, impetuoso, vehemente, fuerte, impulsivo, agresivo, airado, arrebatado, brusco. Hasta el momento casi que inexplicable, somos el resultado del desorden cósmico colgando en un espacio sin forma gracias a algo llamado gravedad,desde la nave tierra. una fuerza cada vez más grande que nos mantiene con vida y que quizás sea una de las que también nos las quite. Y otros muchos fenómenos, pero que aun así somos una materia existente y viva, muchos queriéndonos discernir a nosotros mismos, dándonos explicaciones creíbles, pero que es difícil para otros y aceptan la del ser superpoderoso que los hizo para que sean felices y después de unos años viajar a otro lugar hermoso donde los serán aun mas.
Yo en comparación con ellos me veo desde dos posiciones: ellos esclavos de su mentira y yo de mi verdad, ellos se cohíben pero yo me libero, no se cual de las dos sea la mejor, pero lo que sí es cierto es que el ateo le trata de ver el lado positivo a algo que se ha creado sin ningún objetivo claro. A apresar la idea de del paraíso para imaginárnoslo real en este planeta invisible en el cosmos. Que no representa ni el 0 % de la materia total, pero si el 100% de las maravillas de la vida. Sin olvidar que la estamos convirtiendo en el infierno del que habla el libro de cuentos fantásticos de la mayoría de creyentes en Cristo.
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